El último informe publicado por la Administración Nacional Atmosférica y Oceánica de Estados Unidos (NOAA), revela que las concentraciones de dióxido de carbono (CO2) del año pasado alcanzaron 405 ppm, la cual no se había observado en 800.000 años. Además, ese año fue el más cálido y este hecho no se asoció al patrón del ciclo de El Niño. El investigador Greg Johnson mencionó que, si la humanidad dejase de producir las concentraciones de gases de efecto de invernadero actual, la atmósfera continuaría calentándose en las siguientes décadas, quizás siglos. El informe contiene datos recopilados por 524 investigadores de 65 países.