34 participantes, de todas las edades y etnicidades, participaron en un estudio en donde se les colocó bajo el efecto de cambios en el campo magnético para evaluar si los humanos podemos percibir el campo magnético, tal como lo hacen las abejas, salmones, tortugas, aves y ballenas. El estudio realizado por investigadores de laUniversity of Tokyo y publicado en la revista eNeuro. En él se muestra que las señales alpha cerebrales, la cuales están asociadas al estado de actividad o reposo del cerebro, estaban correlacionadas con el cambios del campo magnético al cual fueron sometidos los participantes. Más aún, los investigadores advirtieron que el cerebro pareciera no procesar la información equivocada, ya que no se detectaron cambios en las señales cerebrales cuando el campo magnético se alineaba hacia arriba, sentido contrario al alineación que se percibe en el hemisferio norte, donde fue desarrollado el estudio. Este estudio demuestra que cambios en el campo magnético pueden ser percibidos por el humano de igual manera cómo se percibe la luz, el sonido, el tacto.