Investigadores de la University of Melbourne (Australia), buscan alternativas para mejorar la adaptación de los corales a mayores temperaturas y acidez de los océanos, uno de los grandes efectos causados por el cambio climático. Mediante el uso de un simulador oceánico que posee el Instituto Australiano de Ciencias Marinas (AIMS), un grupo de investigadores liderados por Madeleine van Oppen, experta en genética de corales, pueden aprovechar la oportunidad de generar condiciones naturales y futuras en el simulador para seleccionar aquellos individuos que logran sobrevivir bajo las condiciones de estrés causadas por el cambio climático. La investigación se centra realizar cruzas para generar híbridos con mayores tolerancias, potenciar un microbioma que permita al coral resistir el blanqueamiento y modificar algas simbióticas de los colares para ayudarlos a resistir la elevación de las temperaturas oceánicas.