- La iniciativa aún se encuentra en primer trámite constitucional.
- El texto ha sido promovido por los parlamentarios Guido Girardi, Francisco Chahuán, Álvaro Elizalde y Rabindranath Quinteros.
Un proyecto de ley busca fijar “el uso de diversos estándares UTC para regular la hora oficial en el territorio nacional”, el cual aún se encuentra en primer trámite constitucional.
La iniciativa, impulsada hace casi un año por los parlamentarios Guido Girardi (PPD), Francisco Chahuán (RN) y los PS Álvaro Elizalde y Rabindranath Quinteros, pretende instaurar como hora oficial del país -exceptuando la Isla de Pascua y la isla Salas y Gómez- la zona horaria UTC-5 (Tiempo Universal Coordinado), la misma de Lima, Perú.
Dentro de los argumentos que defiende el proyecto, el principal señala que “El contar con un huso horario desfasado de lo que geográficamente nos corresponde trae consigo consecuencias negativas sobre nuestra fisiología, y por ende, nuestra salud, así como también en términos de rendimiento y seguridad, entre otros, lo que finalmente afecta la calidad de vida de los chilenos y chilenas”.
Entre los efectos que se señalan están el aumento del riesgo de obesidad, diabetes e hipertensión, aumento en la depresión y en el consumo de tabaco, cafeína y alcohol y una exposición a mayor contaminación atmosférica al comienzo del día. Además, de un incremento en el ausentismo escolar.
La semana pasada se discutió esta iniciativa en forma general en el Senado y se acordó que regrese a las comisiones de Salud y Energía para nuevos informes.
Neurobiólogo John Ewer defiende mantención de un horario único durante todo el año
El doctor John Ewer, investigador del Centro Interdisciplinario de Neurociencia de la U. de Valparaíso y experto en relojes biológicos, defendió este miércoles la idea de eliminar los cambios de horario en Chile, manteniendo un horario único. “Es un buen proyecto, porque está basado en la biología de los horarios“, señaló en conversación con Cooperativa en Ruta.
¿La razón? Actualmente no existe el ahorro de energía que en la década de 1970, un hecho que hasta hora justificó la implementación del sistema que mantiene los horarios “de invierno” y “de verano”.
Además, el cambio de horario de la primavera tiene efectos negativos sobre la salud y el desempeño de las personas. “Hay uan aumento entre 5 y 10 por ciento de ataques al corazónporque la gente está más estresada, y esas son muertes completamente evitables sin cambiar horario”, detalló el neurobiólogo.