Investigadores compararon los efectos de las defensas costeras artificiales en Chile y California, abarcando más de 225 kilómetros de playas y, su principal resultado fue identificar cómo esas construcciones afectan a especies que viven en la zona intermareal.
Ciencia, naturaleza, arte y poesía, conversan y se funden en Biodécimas, la obra de Ramiro Bustamante, investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad y académico de la Universidad de Chile, que fue recientemente lanzada y presentada al público.
Así lo planteó Cristián Frêne, director de la Red chilena de Sitios de Estudios Socio-ecológicos de Largo Plazo (LTSER-Chile), destacando la necesidad de una mayor inversión en ciencias, para la generación de registros territoriales de variables ecológicas y sociales, útiles para la toma de decisiones, junto a propuestas que aporten a la resolución de los actuales problemas socio-ambientales.
La bióloga Lynn Margulis, la escritora e ilustradora Beatrix Potter y el reconocido liquenólogo Simon Schwendener inspiraron los nombres de los hermanos protagonistas del libro.
La captura de gases de efecto invernadero es una de las funciones más relevantes que cumplen los ecosistemas vegetales para la mitigación del calentamiento global y sus graves impactos tanto ambientales, como sociales, con implicaciones a nivel local y global.
Con más de 30 años de trayectoria, el licenciado en Biología y Doctorado en Ciencias de la U. de Chile fue destacado por su contribución a las ciencias y al desarrollo del país, a través de investigaciones en fisiología ecológica y evolutiva. El recién galardonado, precisó que “los países que son desarrollados es porque invierten en ciencia y no al revés. (…) Si queremos salir del tercer mundo y del subdesarrollo la forma, no hay otra, es invertir en conocimiento”.
Pese a las últimas lluvias, investigadores señalan que la próxima temporada de incendios puede ser catastrófica. Con bosques secos convertidos en acelerantes, los siniestros afectarían a sectores cercanos a zonas altamente pobladas del país. El llamado es a proteger los bosques de alto valor para la conservación y las personas que viven en sus cercanías. Líderes de la iniciativa formularon declaración que ya cuenta con la adhesión de más de 100 profesionales, incluidos, tres Premios Nacionales de Ciencia.
-La actividad contó con la participación de Milen Duarte, investigadora del IEB, y de Aníbal Pauchard, Ramiro Bustamante y Francisco Squeo, también científicos de nuestro centro.
Con el objetivo de promover el cuidado y protección del Valle de Elqui, y mantener activo el diálogo con la comunidad que habita este territorio, es que se desarrolló una serie de conversatorios virtuales. Pandemia y medioambiente, consecuencias de la minería en el sector, perspectivas de protección del Valle, contaminación lumínica y usurpación de aguas, fueron los temas que se abordaron en el ciclo de foros “EducAcción, protegiendo el Valle de Elqui”.
Las jornadas, que contaron con la participación de investigadores del Instituto de Ecología y Biodiversidad, líderes sociales y habitantes de la comunidad elquina, fue organizada por la ONG Corporación Elqui Valle Sagrado, y Milen Duarte, bióloga ambiental y candidata a doctora en ecología del IEB y la Universidad de Chile.
“La idea de este foro, surgió de la propia comunidad con el objetivo de abarcar problemáticas atingentes al Valle de Elqui y la necesidad de dialogar entre los propios habitantes, sobre los riesgos y amenazas que hoy enfrenta el territorio. La actividad también se desarrolló con el fin de dar conocer el trabajo que venimos realizando desde hace un tiempo, en el ámbito medioambiental y de protección de la biodiversidad”, comenta la científica del IEB.
La motivación se concretó tras observar trabajos de prospecciones mineras a comienzos de este año, y aún más, cuando en marzo se presentó un estudio de impacto ambiental a raíz de un proyecto minero que abarcaría desde la comuna de La Serena hasta Vicuña, “estudio en el que nosotros también buscamos participar y entregar nuestras observaciones”, declara Milen Duarte.
Conversatorios
La primera charla, dedicada a pandemia y medioambiente, se realizó el 14 de julio, y contó con la participación de los investigadores del IEB, Aníbal Pauchard -de la Universidad de Concepción- y Ramiro Bustamante -de la U. de Chile. Durante la actividad, Pauchard señaló que el cambio global está perjudicando a la biodiversidad y presionando cada vez más a los ecosistemas naturales. También abordó los efectos de las especies invasoras, cuya introducción en nuevos territorios, propiciada por la acción humana y la globalización, genera desbalances y favorece procesos críticos como la actual pandemia. El castor, abejorro europeo, la zarzamora, la chinita arlequín, y virus como el SARS- CoV2, son ejemplos que el científico destacó.
Por su parte, Ramiro Bustamante abordó el origen e historia de las pandemias, y las condiciones que favorecen estos procesos, como la relación de los seres humanos con nuestra biodiversidad. Expansión urbana, tenencia de mascotas exóticas y consumo de animales nativos, son algunos motores que aceleran las zoonosis y el desarrollo de enfermedades emergentes, según estima el investigador. En el caso del coronavirus y su relación con la ecología, el científico de IEB explicó que los virus son “parásitos obligados, con vidas muy cortas y alta capacidad de mutación”, generando así una coevolución o guerra armamentista, en su vínculo con los humanos.
Durante la actividad, el ecólogo de la U. de Chile también realizó un llamado a consolidar canales de información basados en evidencia que, realmente, puedan ser un apoyo a la ciudadanía, fomentando el pensamiento crítico y no la confusión.
El segundo foro, efectuado el 21 de julio, ahondó en las «Consecuencias de la minería en el Valle del Elqui». En esta jornada participó Milen Duarte, quien abordó los efectos del extractivismo sobre la biodiversidad en éste y otros territorios. En ese contexto, la ecóloga explicó que el impacto sobre las especies, la contaminación del aire y la salud humana, son algunos de los problemas asociados a la minería, y que el 34% de la actividad minera del mundo se concentra en Sudamérica. El conversatorio también contó con la presencia de Yimmy Zuleta, habitante de El Toro en la cuarta región, quien se refirió a los efectos de la minería en la vida cotidiana de sus habitantes y en aspectos como el desplazamiento de comunidades producto de estas actividades, en zonas cercanas como Andacollo.
La tercera jornada, dedicada a las “Perspectivas de protección del Valle del Elqui”, contó con la participación de Francisco Squeo, investigador del IEB, de CEAZA y la Universidad de la Serena. El ecólogo mostró el trabajo de protección que se está realizando en la zona alta de la comuna de Paihuano, sobre los 2 mil metros, donde se encuentra el santuario de la naturaleza “Estero Derecho”, una zona de riquísima biodiversidad, alto valor cultural y que busca convertirse en Reserva de la Biósfera.
El científico destacó los esfuerzos realizados desde hace veinte años en la Región de Coquimbo, territorio que posee la mayor diversidad vegetal de Chile y gran endemismo (53,5%).
En esta actividad también participaron Juan Vargas y José Canihuante, habitantes de la comunidad, quienes compartieron sus conocimientos y experiencia.
El último foro del ciclo se realizó el 4 de agosto, con el conversatorio: “Del cielo al suelo: contaminación lumínica y usurpación de las aguas”, dos áreas que también preocupan a la comunidad de Elqui. Esta jornada, estuvo liderada por Pedro Sanhueza (OPCC) y Henry Saldaño (Unión regional por la cultura campesina e indígena de Atacama).
Tras la realización de la jornada, Milen Duarte destacó la importancia de estas interacciones y la vinculación de la ciencia formal con la gente, como base para la generación de alianzas y figuras de protección que ayuden a resguardar el territorio, su biodiversidad, y el buen vivir de sus habitantes.
El problema es uno de los temas del libro recientemente aparecido, “El cambio climático y la biología funcional de los organismos”, editado por Francisco Bozinovic y Lohengrin Cavieres de la Universidad Católica, que reúne el trabajo de destacados investigadores en el área de la biología funcional aplicada al actual proceso de calentamiento global. Entre las enfermedades reemergentes destacan la tuberculosis y la malaria, la extensión del dengue, el resurgimiento de la plaga del cólera y las enfermedades transmitidas por garrapatas. Por otra parte, entre las enfermedades emergentes se encuentran por ejemplo los virus Marburg –que causa una enfermedad hemorrágica severa–, el famoso ébola, el síndrome pulmonar por hantavirus (HCP) y la cepa de E. coli O157-H7, entre otros.
Rapa Nui se ubica en medio del océano Pacífico a más de 3.600 kilómetros de las costas de Chile, siendo uno de los lugares más remotos del mundo.
Cada año, antes de la reciente pandemia, era visitada por más de 100 mil personas, sobre todo por sus famosos moáis, las icónicas estatuas de piedra que hoy son el recuerdo de los ancestros de los actuales habitantes.