Elaborado por la revista PLOS-Biology, destacó a un total de 160 mil científicos y científicas provenientes de todo el mundo y de diversas áreas científicas por sus logros relacionados a cantidad de papers publicados y de citaciones, entre otros.
Buscando relevar los avances científicos de todo el mundo, es que la revista científica PLOS-Biology publicó el artículo “A standardized citation metrics author database annotated for scientific field”, donde se analizó la producción científica de más de 6 millones de investigadores e investigadoras de diversas disciplinas a nivel mundial. De ese total, los 160.000 mejores fueron seleccionados y ordenados por productividad desde el inicio de su carrera hasta 2019.
Según sus temas de investigación, René Garreaud, académico del Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile, ocupó el puesto 86 a nivel mundial en investigación meteorológica, Antonio Lara, académico de la Facultad de Ciencias Forestales, ocupó el puesto 272 mundial en investigación forestal, y Patricio Moreno, director del Núcleo Milenio Paleoclima, alcanzó el puesto 330 a nivel internacional en investigación paleontológica, dando cuenta del impacto internacional de la investigación disciplinaria liderada por integrantes del (CR)2.
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ISP aprobó el uso de vacuna Coronavac en Chile
Un nuevo estudio dirigido por la Universidad Northwestern está revelando el misterio de cómo las moléculas de ARN se pliegan para encajar dentro de las células y realizar funciones específicas. Los hallazgos podrían romper una barrera para comprender y desarrollar tratamientos para enfermedades relacionadas con el ARN, incluida la atrofia muscular espinal y quizás incluso el nuevo coronavirus.
El ornitorrinco australiano, parecido a un castor y pico de pato, exhibe una serie de características extrañas: pone huevos en lugar de dar a luz a bebés vivos, suda leche, tiene espolones venenosos e incluso está equipado con 10 cromosomas sexuales. Ahora, los investigadores han realizado un mapeo único del genoma del ornitorrinco y han encontrado respuestas sobre el origen de algunas de sus características más extrañas.
Contrario a lo que ha sostenido el gobierno, esta columna demuestra que no estamos ante un rebrote de la pandemia y que las cifras están lejos de ser alentadoras. Revisando el número de casos, positividad, niveles de hospitalización y fallecidos, y comparando con el escenario que enfrentábamos el año pasado, la autora sostiene que es urgente tomar medidas drásticas para evitar repetir la historia.
Frente a la solicitud de exportación de la vacuna, uno de los investigadores principales del ensayo clínico de la vacuna inglesa, Sergio Vargas, conversó con Ciudadano ADN.
El infarto cerebral es una de las principales causas de muerte y pérdida de capacidad funcional a nivel mundial. En la búsqueda de tratamientos que ayuden a disminuir los efectos a largo plazo de esta enfermedad, un gran problema ha sido la baja capacidad de extrapolar a humanos los resultados positivos obtenidos en ratones. Un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard en Estados Unidos descubrió que la diferencia entre los ritmos circadianos de ambas especies puede ser una de las claves para entender esta disyuntiva.
AUSTRAL-omics es parte del programa de vigilancia genómica que lleva adelante el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación junto al Ministerio de Salud, Instituto de Salud Pública y el Consorcio Chileno de Genomas CoV2.
Nuestro plantel firmó un Memorándum de Entendimiento con la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos (Asilfa), alianza que permitirá dar vida a un Centro de Producción de Vacunas y Productos Biológicos en el Parque Académico Laguna Carén. Julio Jiménez, presidente de la entidad gremial, valoró la posibilidad de iniciar este trabajo junto a la Casa de Bello. El Rector Ennio Vivaldi, en tanto, afirmó que «estamos dando un paso muy importante para el país».
Los discos duros y las unidades ópticas almacenan gigabits de datos digitales con solo presionar un botón. Pero esas tecnologías, como las cintas magnéticas y las unidades de disquete anteriores a ellas, pueden volverse anticuadas e ilegibles cuando son superadas por nuevas tecnologías. Ahora, los investigadores han encontrado una forma de escribir datos electrónicamente en el ADN de bacterias vivas, una opción de almacenamiento que es poco probable que quede obsoleta en el corto plazo.